Ingredientes
- 1 cucharadita (5 ml) de extracto de vainilla transparente
- 1 paquete de 12 oz. (340 g) caramelos Candy Melts blancos
- 1 ½ tazas (190 g) de galletas Graham (galletas marías o similares)
- 2 cucharadas (30 g) azúcar granulada para la masa
- 2/3 tazas (130 g) de azúcar granulada para relleno
- 1/4 taza (45 g o 1/2 barrita) de mantequilla, derretida
- 3 paquetes (de 190 g cada uno) de queso crema, ablandado (7 onzas cada uno)
- 4 huevos
- 1 1/3 tazas (320 g) de crema para batir
Paso 1
Precaliente el horno a 160ºC (300ºF). Prepare el molde de 22 cm (9 pulg.) con recubrimiento anti-adherente. Envuelva la mitad inferior del molde con papel aluminio resistente.
Paso 2
Para la corteza, mezcle las migajas de galleta, el azúcar y la mantequilla. Vierta la mezcla en el molde preparado y presione firmemente en el fondo.
Paso 3
Aparte, en un recipiente grande, bata el queso crema y el azúcar con una batidora eléctrica a velocidad media hasta que esté suave y esponjosa. Agregue los huevos, uno a la vez, mientras los mezcla a baja velocidad.
Paso 4
Derrita los Candy Melts según las instrucciones del empaque. Deje enfriar un poco. Agregue el caramelo derretido, la vainilla y la crema a la mezcla de queso crema. Mezclar bien. Vierta la masa en el molde.
Paso 5
Coloque el molde sobre una charola de galletas. Llene la charola para galletas con aproximadamente 1/2 pulgada de agua. Hornee por 2 horas y 15 minutos o hasta que el centro de la tarta de queso se agite ligeramente. Deje enfriar sobre una rejilla de enfriamiento. Refrigere durante la noche o al menos 12 horas hasta que la tarta de queso esté firme. Finalmente, cubra con su cobertura favorita como chocolate o fruta.